Cuando empecé a fabricar motos, los profetas de los malos augurios, a veces mis mejores amigos, venían a desalentarme. Yo no los escuché y, pese a sus opiniones pesimistas, el 24 de septiembre de 1948 creé la compañía Honda Motor, que hoy brilla en todo el mundo

Sólo atravesando la noche se llega a la mañana

Acuérdate de conservar un alma igual en la fragosa adversidad

Las dificultades no aparecen para obstruir, sino para instruir

En tiempo de desolación nunca hacer mudanza

Sin Piernas, sin brazos, sin límites

De niño, yo pensé que no tenía sentido mi vida, que no estaba destinado para hacer algo importante, pero gracias a que me caí y me equivoqué muchas veces es que estoy ahora aquí

Tenemos que aprender a navegar con vientos fuertes

Los únicos limites que existen son los que nosotros mismos nos imponemos

La adversidad es nuestra madre; la prosperidad sólo es nuestra madrastra.