Los hombres nunca están realmente dispuestos a morir experto por el ara de libertad: por lo tanto, no creo en la muerte por completo

¡Qué difícil, qué amargo es llegar a ser un hombre

El progreso real sólo está en aprender a equivocarse solo

Nos metemos en el hábito de vivir antes de adquirir el hábito de pensar. En esa carrera que a diario nos precipita hacia la muerte, el cuerpo mantiene su liderazgo irreparable

Cuando te has agotado verdaderamente, aparece una experiencia que siempre reverencias y te encanta

Como remedio a la vida en sociedad, me permito sugerir la gran ciudad. Hoy en día, es el único desierto dentro de nuestras posibilidades

Cultura: el grito de su destino en la cara de los hombres

Con el fin de entender el mundo, uno tiene que alejarse de él en alguna ocasión

Ten en cuenta, además, que no es más inmoral robar directamente a los ciudadanos que imponer impuestos indirectos en el precio de los bienes de los que no pueden prescindir

La verdadera generosidad del futuro consiste en darlo todo en el presente