Con buenos pensamientos puede hacerse pésima literatura

Sabio es aquel que constantemente se maravilla de nuevo

Mi propia posición en el cielo con relación al Sol no debe hacerme encontrar menos bella la aurora

Nuestra alegría es igual que el agua movediza de los ríos, que sólo debe su frescor a su constante fugacidad

Cree a aquellos que buscan la verdad; duda de los que la han encontrado

El porvenir pertenece a los innovadores

Cuando deje de indignarme, habrá comenzado mi vejez

Lo importante se halla en la mirada, no en la cosa mirada

El secreto de mi felicidad está en no esforzarme por el placer, sino en encontrar el placer en el esfuerzo

El pensamiento de la muerte me persigue con una obstinación singular. A cada gesto que hago, calculo: ¿cuántas veces ya? Me pregunto: ¿cuántas veces todavía? Y siento, lleno de desesperación, precipitarse la revolución del año