Nunguno hay que no pueda ser maestro de otro en algo

Nace bárbaro el hombre; redímese de bestia, cultivándose

No hay maestro que no pueda ser discípulo

Las verdades que más nos importan vienen siempre a medio decir

Cada uno muestra lo que es en los amigos que tiene

Aprobarlo todo suele ser ignorancia; reprobarlo todo, malicia

Para gobernar locos es menester gran seso y para regir necios, gran saber

Si los hombres no son fieras es porque son más fieros

Todo juez de sí mismo halla luego textos de escapatoria

Todos los mortales andan en busca de la felicidad, señal de que ninguno la tiene. Ninguno vive contento con su suerte