El peor analfabeto es el analfabeto político. No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el costo de la vida, el precio de los frijoles, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas

El regalo más grande que le puedes dar a los demás es el ejemplo de tu propia vida

Reía porque sus enemigos no podían alcanzarlo, ignoraba que ejercitaban para errar el tiro

Quiero ir con aquel a quien amo. No quiero calcular lo que cuesta. No quiero averiguar si es bueno. No quiero saber si me ama. Quiero ir con aquél a quien amo

Me parezco al que llevaba el ladrillo consigo para mostrar al mundo cómo era su casa

La ciencia tiene un solo precepto: contribuir a la ciencia

El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales

En los tiempos sombríos, ¿se cantará también?. También se cantará sobre los tiempos sombríos

Esos que pretenden, para reformarnos, vencer nuestro instinto criminal, que nos den primero de comer. De moral hablaremos después. Esos que no se olvidan de cuidar nuestra formación, sin que por ello dejen de engordar, escuchen esto: por más que le den vueltas, primero es comer, y después de hartos ¡venga la moral!

El hombre que no debe seguir tal como es, es necesario verlo también como podría ser y acostumbrarse a esa visión