La ignorancia es la madre de los crímenes. Un crimen es, ante todo, una falta de raciocinio

¿No están acaso nuestros sentimientos, por así decirlo, escritos en las cosas que nos rodean?

La pasión constituye todo lo humano. Sin ella, la religión, la novela, el arte, serán inútiles

La mujer se burla de los hombres como quiere, cuando quiere y mientras quiere

Entre los tontos el vacío se parece a la profundidad. Para el que es vulgar, la profundidad es incomprensible. De ahí viene quizá la admiración del pueblo por todo aquello que no comprende

Si los jóvenes hermosos, fuertes, llenos de vida, de ansias palpitantes, no fueran ignorantes y tímidos, la vida social sería imposible

Un desgarrón en la ropa es una desgracia; una mancha, un vicio

Sólo los necios se ríen de los que no entienden

A veces hablamos mucho y decimos poco. Para expresar más, conviene pensar más

Los hombres superiores son los únicos que saben amar