Donde la mano siente el pinchazo de las espinas, los ojos descubren un ramo de rosas espléndidas, llenas de aroma
Mostrando de la 11 a la 20 de 23 frases de José María Escrivá.
Donde la mano siente el pinchazo de las espinas, los ojos descubren un ramo de rosas espléndidas, llenas de aroma
El pedante interpreta como ignorancia la sencillez y la humildad del docto
Dios os llama a servirle en y desde las tareas civiles, materiales, seculares de la vida humana: en un laboratorio, en el quirófano de un hospital, en la cátedra universitaria, en la fábrica, en el taller, en el hogar de familia y en todo el inmenso panorama del trabajo, Dios nos espera cada día
Cada vez estoy más persuadido: la felicidad del Cielo es para los que saben ser felices en la tierra
Si sabes que tu cuerpo es tu enemigo, y enemigo de la gloria de Dios, al serlo de tu santificación, ¿Por qué le tratas con tanta blandura?
La atención de la mujer casada debe centrarse en el marido y en los hijos. Como la del marido debe centrarse en su mujer y en sus hijos
El matrimonio es una vocación divina
Los enamorados no saben decirse adiós se acompañan siempre
El cristiano debe amar a los demás, y por tanto, respetar las opiniones contrarias a las suyas, y convivir con plena fraternidad con quienes piensan de otro modo
La resistencia de una cadena se mide por su eslabón más débil