Cuando llegue el día del juicio, no se nos preguntará lo que hemos leído sino lo que hemos hecho

Todos anhelan por la paz; pero no todos quieren hacer lo conducente a la paz verdadera

Tienen mi paz los humildes y mansos de corazón

Por lo tanto, no juzgues haber alcanzado la paz verdadera por no tener pesadumbre ninguna

Sin trabajar, no se descansa; no se vence sin luchar

Lucha virilmente y soporta con paciencia

Tu perfecta felicidad está en Dios, creador de todos los bienes

Ninguna cosa, por pequeña que sea, pasará sin mérito a la vista de Dios, siempre que se lleva por Dios

Cuando goces de la gracia, recuerda qué miserable y débil sueles sentirte

Amándome desordenadamente me perdí. Amándote a ti solo., buscándote, te encontré y me encontré