Adiós, ríos; adiós, fuentes; adiós, regatos pequeños; adiós, vista de mis ojos: no sé cuando nos veremos

¡Ahora sí! ¡Adiós mis amados amigos!

La casa estaba vacía en la hora de la despedida, y sin embargo quedaban las cosas de nuestra vida

¿Quieres que conservemos una dulce memoria de este amor?, pues amémonos hoy mucho y mañana ¡digámonos, adiós!

Todo se va, todo cae, todo fina

Se apoyaron sus brazos sobre la mesa y la rubia cabeza se desplomó pesadamente sobre ellos. Una mirada más de eterna despedida y se cerró la puerta tras de mí. Había empezado a abrirse entre nosotros el inmenso abismo de la separación

Sólo lo que se pierde es adquirido para siempre

Y al partir serán estas mis últimas palabras: Me voy, dejo mi amor detrás

Se me va mañana; ya empecé a llorarla hoy. Qué amor tan sin amor

¡Cómo lucha mi amor por asirte! Más si es duro tener que alejarte, ¡mis palabras no deben herirte si mis besos no pueden curarte!