Es preferible fiarse del hombre equivocado a menudo, que de quien no duda nunca.

Es débil porque no ha dudado bastante y ha querido llegar a conclusiones.

Si de algo soy rico es de perplejidades y no de certezas.

La duda es uno de los nombres de la inteligencia.

Si dudas de ti mismo, estás vencido de antemano.

Hablan mucho de la belleza de la certidumbre como si ignorasen la belleza sutil de la duda. Creer es muy monótono; la duda es apasionante.

Duda siempre de ti mismo, hasta que los datos no dejen lugar a dudas.

Es menos malo agitarse en la duda que descansar en el error.

En todas las actividades es saludable, de vez en cuando, poner un signo de interrogación sobre aquellas cosas que por mucho tiempo se han dado como seguras.

No harán muy grandes cosas los vacilantes que dudan de la seguridad.