Los vicios vienen como los pasajeros, nos visitan como húespedes y se quedan como amor.
Cuando los vicios nos dejan, nos envanecemos con la creencia de que los hemos dejado.
Nadie se desembaraza de un hábito o de un vicio tirándolo de una vez por la ventana; hay que sacarlo por la escalera, peldaño a peldaño.
Es más costoso alimentar un vicio que criar dos hijos.
Nadie nace libre de vicios. El hombre más perfecto es el que tiene menos.
La más estricta justicia no creo que sea siempre la mejor política.
Todo lo que soy o espero ser se lo debo a la angelical solicitud de mi madre.
Todos los hombres nacen iguales, pero es la última vez que lo son.
Mejor es callar y que sospechen de tu poca sabiduría que hablar y eliminar cualquier duda sobre ello.
Ha sido mi experiencia, que gente que no tiene vicios tiene muy pocas virtudes.