De las cosas que tienes, escoge las mejores y después medita cuán afanosamente las hubieras buscado si no las tuvieras.

Tener no es poseer. Puede tenerse aquello que no se desea. Posesión es tener y disfrutar lo que se tiene.

Perderlo todo es ganarlo todo, porque no se posee eternamente más que lo que se ha perdido.

Cuando entra en juego la posesión de los bienes terrenales es difícil que los hombres razonen con justicia.

Si el hombre normal del pasado tenía un grave respeto a la propiedad, pudo ser muy bien que fuese porque a veces tenía él una propiedad.