Cuando una batalla está perdida, sólo los que han huido pueden combatir en otra.
La huida no ha llevado a nadie a ningún sitio.
A quienes me preguntan la razón de mis viajes les contesto que sé bien de qué huyo pero ignoro lo que busco.
La gota horada la roca, no por su fuerza sino por su constancia.
Apresúrate; no te fíes de las horas venideras. El que hoy no está dispuesto, menos lo estará mañana.
Nada es más útil al hombre que aquellas artes que no tienen ninguna utilidad.
El que ha naufragado tiembla incluso ante las olas tranquilas.
El alma descansa cuando echa sus lágrimas; y el dolor se satisface con su llanto.