Todo error deja una enseñanza, toda enseñanza deja una experiencia y toda experiencia deja una huella.
Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas.
Las enseñanzas orales deben acomodarse a los hábitos de los oyentes.
Para enseñar a los demás, primero has de hacer tú algo muy duro: has de enderezarte a ti mismo.
La mayor parte de la gente confunde la educación con instrucción.
La peor soledad que hay es el darse cuenta de que la gente es idiota.
Cuando hay dinero de por medio es muy difícil la libertad.
La conducta humana no revela la verdad porque el hombre es un animal que miente
Una buena mentira hay que contarla por etapas, como toda narración bien compuesta
La imaginación y el pensamiento no se encierran ni se encadenan