El verdadero progreso es el que pone la tecnología al alcance de todos.
Dos cosas contribuyen a avanzar: ir más deprisa que los otros o ir por el buen camino.
La humanidad progresa. Hoy solamente queman mis libros; siglos atrás me hubieran quemado a mi.
Muchos que se adelantaron a su tiempo tuvieron que esperarlo en sitios poco cómodos.
La palabra progreso no tiene ningún sentido mientras haya niños infelices.
La falta de generosidad al vencer disminuye el mérito y los frutos de la victoria.
La constancia es el complemento indispensable de todas las demás virtudes humanas.
Los únicos goces puros y sin mezcla de tristeza que le han sido dados sobre la tierra al hombre, son los goces de familia.
La familia es la patria del corazón.
Mientras, doméstica o extranjera, tenga usted tiranía, ¿cómo puede tener patria? La patria es la casa del hombre, no la del esclavo.