No ha habido hombre de genio extraordinario sin mezcla de locura.
La locura radica en comportarse siempre de la misma manera y esperar resultados diferentes.
La imperfección es belleza. La locura es un genio y es mejor ser absolutamente ridículo a ser absolutamente aburrido.
Mezcla a tu prudencia un grano de locura.
Todos nacemos locos. Algunos continúan así siempre.
Nuestro gran error es intentar obtener de cada uno en particular las virtudes que no tiene, y desdeñar el cultivo de las que posee.
Exageráis la hipocresía de los hombres. La mayoría piensa demasiado poco para permitirse el lujo de poder pensar doble.
Hay que escuchar a la cabeza, pero dejar hablar al corazón.
El descuido es un sucedáneo de la mentira.
Tener razón demasiado pronto es lo mismo que equivocarse.