No ha habido hombre de genio extraordinario sin mezcla de locura.
La locura radica en comportarse siempre de la misma manera y esperar resultados diferentes.
La imperfección es belleza. La locura es un genio y es mejor ser absolutamente ridículo a ser absolutamente aburrido.
Mezcla a tu prudencia un grano de locura.
Todos nacemos locos. Algunos continúan así siempre.
El que no sienta ganas de ser más, llegará a no ser nada.
Sucede con frecuencia que llega uno a encontrar una idea que buscaba, llega a darle forma, es decir a obtenerla, sacándola de la nebulosa de percepciones oscuras a que representa, gracias a los esfuerzos que hace para presentarla a los demás.
La falta de caridad y de amor proceden de una falta de imaginación. Una ligera molestia propia nos duele más que el espectáculo de un terrible dolor ajeno, y el propio apetito nos incita más que el pensar en todo el hambre del prójimo.
El fascismo se cura leyendo y el racismo se cura viajando.
Procuremos más ser padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado.