No ha habido hombre de genio extraordinario sin mezcla de locura.
La locura radica en comportarse siempre de la misma manera y esperar resultados diferentes.
La imperfección es belleza. La locura es un genio y es mejor ser absolutamente ridículo a ser absolutamente aburrido.
Mezcla a tu prudencia un grano de locura.
Todos nacemos locos. Algunos continúan así siempre.
Es necesario esperar, aunque la esperanza haya de verse siempre frustrada, pues la esperanza misma constituye una dicha, y sus fracasos, por frecuentes que sean, son menos horribles que su extinción.
La pobreza es un gran enemigo de la felicidad humana. Destruye la libertad y hace impracticables algunas virtudes y sumamente difíciles otras.
La curiosidad es una de las permanentes y seguras características de un intelecto vigoroso.
En la mayoría de los hombres, las dificultades son hijas de la pereza.
Se puede tener por compañera la fantasía, pero se debe tener como guía a la razón.