Creo en la vocación de cada uno de nosotros. Nos sentimos atraídos por el camino que nos corresponde. Crear las condiciones para la felicidad consiste en saber lo que nos lleva hacia una situación determinada de la vida. Es así como nuestro ser florecerá.
En la amistad de la que hablo (las almas) se mezclan y se confunden una en otra en una mezcla tan universal, que ya no encuentran la costura que las ha unido. Si me obligan a decir por qué lo amaba, siento que esto no puede expresarse más que respondiendo: porque era él, porque era yo.
La confianza en la bondad ajena es testimonio no pequeño de la propia bondad.
El que teme padecer padece ya lo que teme.
La conciencia hace que nos descubramos, que nos denunciemos o nos acusemos a nosotros mismos, y a falta de testigos declara contra nosotros.
No existe el presente: Lo que así llamamos no es otra cosa que el punto de unión del futuro con el pasado.