La sabiduría de los sabios y la experiencia de los siglos pueden condensarse con las citas.
La gente goza de tan poca fantasía que tiene que recoger con ansia unos de otros esos pequeños adornos de la conversación. Son como traperos o colilleros de frases hechas.
Las citas son una manera de repetir erróneamente las palabras de otro.
Nada es real hasta que se experimenta; aun un proverbio no lo es hasta que la vida no lo haya ilustrado.
La frase es el alma del pensamiento; con una frase se hiere y hasta se mata. Durante largo tiempo se recuerda y se repite.
Si cometieres una acción vergonzosa, no creas que podrás ocultarla; y aunque lograras esconderla a los ojos de los demás, tu conciencia la descubriría.
Las matemáticas son una gimnasia del espíritu y una preparación para la filósofia.
Probamos el oro en el fuego, distinguimos a nuestros amigos en la adversidad.