Si no peleas para acabar con la corrupción y la podredumbre acabarás formando parte de ella.
Los hombres son pervertidos no tanto por la riqueza como por el afán de riqueza.
Muchos jueces son incorruptibles, nadie puede inducirlos a hacer justicia.
Lo último corrompido ¿no es el principio de lo engendrado?
Si no peleas para acabar con la corrupción y la podredumbre, acabarás formando parte de ella.
Quien se enfada por las críticas, reconoce que las tenía merecidas.
Todo lo desconocido se supone maravilloso.
De lejos es mayor el respeto.
Cuando gozamos de salud, fácilmente damos buenos consejos a los enfermos.
En un espíritu corrompido no cabe el honor.