El esclavo que obedece escoge obedecer.
¿Quieres dejar de pertenecer al número de los esclavos? Rompe tus cadenas y desecha de ti todo temor y todo despecho.
Nadie puede poner una cadena en el tobillo de su prójimo sin tener el otro extremo alrededor de su cuello.
Cuando una puerta de felicidad se cierra, otra se abre. Pero con frecuencia miramos tanto a la puerta cerrada que no somos capaces de ver la puerta que se ha abierto frente a nosotros.
El mundo está lleno de sufrimiento pero también de superación del mismo.
No es posible que la civilización fluya hacia atrás mientras que hay juventud en el mundo. Los jóvenes pueden ser testarudos, pero van a hacer avanzar este mundo
La herejía de una época se convierte en la ortodoxia de la siguiente
De todos los sentidos, la vista debe ser el más encantador