Amarse a uno mismo es el comienzo de una aventura que dura toda la vida.
El amor propio, al igual que el mecanismo de reproducción del genero humano, es necesario, nos causa placer y debemos ocultarlo.
Hay amor propio en el amor como hay interés personal en la amistad.
Al amor propio se le hiere; no se le mata.
Hay algo peor que la muerte, peor que el sufrimiento... y es cuando uno pierde el amor propio.
A los timidos y a los vacilantes todas las cosas les resultan imposibles, porque así les parecen.
El que sube una escalera debe empezar por el primer peldaño.
La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno.
A los tímidos y a los indecisos todo les resulta imposible, porque así se lo parece.
Mira hacia atrás y ríete de los peligros pasados.