Suelen hacer falta tres semanas para preparar un discurso improvisado.
Rara vez ocurre lo que anticipamos, suele ocurrir lo que menos esperamos
Si no se espera, no se da con lo inesperado
No pasa de ser un pobre ratón el que solamente conoce un agujero para escapar
El sabio no se sienta para lamentarse, sino que se pone alegremente a su tarea de reparar el daño hecho.
La memoria es el centinela del cerebro.
Si el dinero va delante, todos los caminos se abren.
Nosotros debemos nuestra vida a dios, por eso si se la pagamos hoy, no se la deberemos mañana.
Si todo el año fuese fiesta, divertirse sería más aburrido que trabajar.