El arte de la música es el que más cercano se halla de las lágrimas y los recuerdos.
Donde hay música no puede haber cosa mala.
La música debe hacer saltar fuego en el corazón del hombre, y lágrimas de los ojos de la mujer.
Sin música la vida sería un error.
La música no es otra cosa que sonidos salvajes civilizados.
Los abogados están siempre dispuestos a poner a un hombre en dificultades para sacarle luego de ellas.
Puedes dar un mejor sermón con tu vida que con tus labios.
Nuestra mayor gloria no está en no haber caído nunca, sino en levantarnos cada vez que caemos.
El mayor espectáculo es un hombre esforzado luchando contra la adversidad; pero hay otro aún más grande: ver a otro hombre lanzarse en su ayuda.
Una vida de placer es, precisamente, la vida menos placentera que pueda existir