Cuando pedimos consejo lo que esperamos a menudo es más bien aprobación.
Encuentra lo que más te gusta hacer y consigue a alguien que pague para que lo hagas.
No entres allá de donde no puedas libremente salir.
Un consejo es siempre una confesión.
Ninguna cosa hay tan difícil como el arte de hacer agradable un buen consejo.
Tres cosas distinguen al hombre superior: siendo virtuoso, está libre de ansiedad; siendo sabio, está libre de perplejidad; siendo valiente, está libre de temor.
Los vicios vienen como pasajeros, nos visitan como huéspedes y se quedan como amos.
Amar y reconocer al mismo tiempo los defectos de la persona amada; odiar y saber estimar las buenas cualidades de aquellos a quienes se odia, son dos cosas bastante raras de hallar bajo la capa del cielo.
El hombre más noble a todo se acomoda, aunque no sea obsequioso. El hombre inferior es obsequioso, pero no se acomoda a los demás.
Aprender sin pensar es trabajo perdido; pensar sin aprender es peligroso.