Se mide la inteligencia del individuo por la cantidad de incertidumbres que es capaz de soportar.
Este punto es la montaña que hay que escalar sin actuar. ¡Inteligencia!
Un hombre inteligente es aquel que sabe ser tan inteligente como para contratar gente más inteligente que él.
Los hombres que tienen la expresión inteligente, defraudan después porque no dan todo lo que nos prometieron. En este sentido, es una ventaja parecer tonto.
La inteligencia consiste no sólo en el conocimiento, sino también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica.
De querer ser a creer que se es ya, va la distancia de lo trágico a lo cómico.
La razón pura tiene que ceder su imperativo a la razón vital: la vida debe ser vital.
El amor muere porque su nacimiento fue una equivocación.
Porque el hombre siente el amor primariamente como un violento afán de ser amado, al paso que para la mujer lo primario es sentir el propio amor, la cálida fluencia que de su ser irradia hacia el amado y la impulsa hacia él.
El amor, a quien pintan ciego, es vidente y perspicaz porque el amante ve cosas que el indiferente no ve y por eso ama.