No me siento obligado a creer que un dios que nos ha dotado de inteligencia, sentido común y raciocinio, tuviera como objetivo privarnos de su uso.
Sólo conozco dos tipos de personas razonables: las que aman a Dios de todo corazón porque le conocen, y las que le buscan de todo corazón porque no le conocen.
¿Es el hombre sólo un fallo de Dios, o Dios sólo un fallo del hombre?
Nosotros debemos nuestra vida a dios, por eso si se la pagamos hoy, no se la deberemos mañana.
Dios es día y noche, invierno y verano, guerra y paz, abundancia y hambre.
Un optimista es el que cree que todo tiene arreglo. Un pesimista es el que piensa lo mismo, pero sabe que nadie va a intentarlo.
Los amigos son para las ocasiones, salvo en determinados círculos político-económicos, en los que las ocasiones son para los amigos.
Gracias a la guerra uno no sólo puede morir por sus ideales, sino que incluso puede morir por los ideales de otro.
La caridad es la única virtud que precisa de la injusticia
El cine ayuda a soñar La televisión a dormir