La literatura no es un pasatiempo ni una evasión, sino una forma, quizá la más completa y profunda, de examinar la condición humana.
Escribir para niños es un don, como la poesía, que no está al alcance de cualquiera.
Yo en todos los libros acostumbro a leer el prefacio, porque a veces suele ser lo mejor de la obra.
Un pueblo sin literatura es un pueblo mudo.
No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo.
No está mal ser bella; lo que está mal es la obligación de serlo.
La depresión es melancolía sin sus encantos.
Amar duele. Es como entregarse a ser desollado y saber que en cualquier momento la otra persona podría irse llevándose tu piel.
El arte es seducción, no rapto.
Quiero ser capaz de estar sola, encontrarlo nutritivo, no una simple espera.