Ningún mérito tiene la fidelidad mientras dura el amor. La fidelidad no es virtud sino cuando se convierte en deber.
Las mujeres inventaron el amor; los hombres el matrimonio y la fidelidad.
En cosas del amor la constancia es necesaria, la fidelidad un lujo.
Sólo el que manda con amor es servido con fidelidad.
La fidelidad es el esfuerzo de un alma noble para igualarse a otra más grande que ella.
Enamorarse es sentirse encantado por algo, y algo sólo puede encantar si es o parece ser perfección.
El amor auténtico se encuentra siempre hecho. En este amor un ser queda adscrito de una vez para siempre y del todo a otro ser. Es el amor que empieza con el amor.
La vida cobra sentido cuando se hace de ella una aspiración a no renunciar a nada.
Yo soy yo y mi circunstancia; y si no la salvo a ella no me salvo yo
Hay tantas realidades como puntos de vista