Mi madre es mi único mito
La más bella palabra en labios de una persona es la palabra madre, y la llamada más dulce: madre mía
Todo lo que soy, o espero ser, se lo debo a la angelical solicitud de mi madre
No podemos temer nunca cuando tenemos una madre poderosa y amante que vela por nosotros
Enséñame el rostro de tu madre, te diré quién eres
A un gran corazón, ninguna ingratitud lo cierra, ninguna indiferencia lo cansa.
Sucede a veces que se discute porque no se llega a comprender lo que pretende demostrar nuestro interlocutor.
El verdadero amor supone siempre la renuncia a la propia comodidad personal.
Es más fácil hacer leyes que gobernar.
Toda reforma impuesta por la violencia no corregirá nada el mal: el buen juicio no necesita de la violencia.