Pensar es buscar claros en un bosque.
Es muy importante acostumbrarse a pedir aclaraciones al otro, a preguntarle detalles, a invitarle a definir sus tesis con precisión. Así, a la vez que se aprende a escuchar se ayuda a pensar al otro.
Pienso, luego existo.
Pensar es el trabajo más difícil que existe. Quizá sea esta la razón por la que tan pocas personas lo practican.
Quien no quiere pensar es un fanático; quien no puede pensar es un idiota; quien no osa pensar es un cobarde.
La vida es un aprendizaje para someternos a constantes renunciaciones, al fracaso continuado de nuestras pretensiones, de nuestras esperanzas, de nuestras facultades, de nuestra felicidad.
El destino tiene dos maneras de herirnos: negándose a nuestros deseos y cumpliéndolos.
Saber envejecer es la obra maestra de la cordura y una de las partes más difíciles del gran arte de vivir.
Hacer con facilidad lo que es díficil a los demás: esto es el ingenio. Hacer lo que es imposible a las personas de ingenio: esto es el genio.
Nuestro deber es ser útiles, pero no como quisiéramos, sino como podamos.