Es fácil temer, pero penoso; respetar es difícil, pero más dulce.
El respeto es algo que se siente hacia los demás; el respeto es pues el intermediario entre el comportamiento vacío de la tolerancia y la positividad gratuita del amor, entre la observancia ceremonial y la caridad.
El respeto al derecho ajeno es la paz.
La bondad es el principio del tacto, y el respeto por los otros es la primera condición para saber vivir.
El primer efecto del amor es inspirar un gran respeto; se siente veneración por quien se ama.
Nadie está libre de decir estupideces, lo malo es decirlas con énfasis.
El signo más cierto de la sabiduría es la serenidad constante.
Mil rutas se apartan del fin elegido, pero hay una que llega a él.
Los libros son el mejor viático que he encontrado para este humano viaje.
Es preciso prestarse a los otros, pero no darse sino a uno mismo.