Un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse
El que desprecia demasiado, se hace digno de su desprecio
Los hombres más arrogantes son los que generalmente están equivocados, otorgan toda la pasión a sus puntos de vista sin una apropiada reflexión
La soberbia es el abismo donde suele desaparecer hasta el mérito verdadero
Dios se deja conquistar por el humilde y rechaza la arrogancia del soberbio
Es necesario esperar, aunque la esperanza haya de verse siempre frustrada, pues la esperanza misma constituye una dicha, y sus fracasos, por frecuentes que sean, son menos horribles que su extinción.
La pobreza es un gran enemigo de la felicidad humana. Destruye la libertad y hace impracticables algunas virtudes y sumamente difíciles otras.
La curiosidad es una de las permanentes y seguras características de un intelecto vigoroso.
En la mayoría de los hombres, las dificultades son hijas de la pereza.
Se puede tener por compañera la fantasía, pero se debe tener como guía a la razón.