No somos disparados a la existencia como una bala de fusil cuya trayectoria está absolutamente determinada. Es falso decir que lo que nos determina son las circunstancias. Al contrario, las circunstancias son el dilema ante el cual tenemos que decidirnos. Pero el que decide es nuestro carácter.
Lo que hace falta es someter a las circunstancias, no someterse a ellas.
Yo soy yo y mi circunstancia.
Las circunstancias hacen a los hombres hábiles lo que ellos quieren ser, y pueden con los hombres débiles.
Las circunstancias... palabras vacías de sentido con que trata el hombre de descargar en seres ideales la responsabilidad de sus desatinos.
A los timidos y a los vacilantes todas las cosas les resultan imposibles, porque así les parecen.
El que sube una escalera debe empezar por el primer peldaño.
La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno.
A los tímidos y a los indecisos todo les resulta imposible, porque así se lo parece.
El amor propio es el más grande de todos los aduladores.