La paciencia es atender al tiempo del otro, en la plena conciencia de que se vive el tiempo en plural, con los demás, creando un evento de relación, de encuentro, de amor.
La paciencia es amarga, pero sus frutos son dulces.
La paciencia es un árbol de raíz amarga pero de frutos muy dulces.
No confundas la paciencia, coraje de la virtud, con la estúpida indolencia del que se da por vencido.
Paciencia: forma menor de desesperación disfrazada de virtud.
El deseo vence al miedo, atropella inconvenientes y allana dificultades.
Deben buscarse los amigos como los buenos libros. No está la felicidad en que sean muchos ni muy curiosos; sino pocos, buenos y bien conocidos.
No entres allá de donde no puedas libremente salir.
La juventud no es un tiempo de la vida, es un estado del espíritu.
Suelen decir que el hombre que apetece soledad tiene mucho de dios o de bestia.