La habilidad y la constancia son las armas de la debilidad.
La debilidad de actitud se vuelve debilidad de carácter.
No soportamos vernos débiles. El diálogo y la búsqueda de las verdades que nos llevan a construir un proyecto común implican escucha, renuncias, reconocimiento de los errores, aceptación de los fracasos y equivocaciones ... implican aceptar la debilidad
Quién lo diría, los débiles de veras nunca se rinden
El gusto de complacer al amigo es diablo tentador
Nuestro gran error es intentar obtener de cada uno en particular las virtudes que no tiene, y desdeñar el cultivo de las que posee.
El amor y la locura son los motores que hacen andar la vida.
Exageráis la hipocresía de los hombres. La mayoría piensa demasiado poco para permitirse el lujo de poder pensar doble.
Hay que escuchar a la cabeza, pero dejar hablar al corazón.
El descuido es un sucedáneo de la mentira.