No hay desesperación tan absoluta como la que sobreviene en los primeros momentos de nuestra primera gran tristeza, cuando todavía no sabemos lo que es haber sufrido y recibir alivio, haber desesperado y recobrar la esperanza.
La desesperación es el resultado de pretender tomarse en serio la vida con todas sus bondades, la justicia y la razón, y de cumplir con sus exigencias.
No hay situaciones desesperadas; sólo hay hombres que se desesperan en determinadas situaciones.
Una situación se convierte en desesperada cuando empiezas a pensar que es desesperada.
No desesperes, ni siquiera por el hecho de que no desesperas. Cuando todo parece terminado, surgen nuevas fuerzas. Esto significa que vives.
El arte de agradar es el arte de engañar.
La soledad es al espíritu lo que la dieta al cuerpo.
Quien todo sabe sufrir, a todo puede atreverse.
Pasión más viva que la amistad es el odio.
La conciencia es la más variable de todas las reglas