Quizá, el camino más directo para conquistar la fama sea el afirmar con seguridad y pertenencia y, por cuantos modos sea posible, el haberla conquistado.
Vuestra fama es como la flor; que brota y muere; y la marchita el mismo sol que la hizo nacer de la acerba tierra.
No se alcanza la fama reclinado en blanda pluma, ni al abrigo de colchas.
La fama trae la soledad. El éxito es tan frío como el hielo y tan poco hospitalario como el Polo Norte.
A menudo los grandes son desconocidos o peor, mal conocidos.
Ningún efecto procedente de la razón puede durar eternamente, porque los deseos de los hombres suelen cambiar según las influencias del cielo.
No hay mayor dolor que recordar los tiempos felices desde la miseria.
Sé firme como una torre, cuya cúspide no se doblega jamás al embate de los tiempos.
Si no se modera tu orgullo, él será tu mayor castigo.
Vuestra fama es como la flor; que brota y muere; y la marchita el mismo sol que la hizo nacer de la acerba tierra.