Quizá, el camino más directo para conquistar la fama sea el afirmar con seguridad y pertenencia y, por cuantos modos sea posible, el haberla conquistado.
Vuestra fama es como la flor; que brota y muere; y la marchita el mismo sol que la hizo nacer de la acerba tierra.
No se alcanza la fama reclinado en blanda pluma, ni al abrigo de colchas.
La fama trae la soledad. El éxito es tan frío como el hielo y tan poco hospitalario como el Polo Norte.
A menudo los grandes son desconocidos o peor, mal conocidos.
Los genios son los que dicen mucho antes lo que se va a decir mucho después.
La única alegría de los casados está en asistir a la boda de los otros... ¡Alegría diabólica!
Donde rompen los amantes para siempre queda el monumento de su despedida. Lo volverán a ver intacto y marmóreo cuantas veces pasen por este sitio
El amor nace del deseo repentino de hacer eterno lo pasajero
El mejor destino que hay es el de "supervisor de nubes", acostado en una hamaca mirando al cielo