La gota horada la roca, no por su fuerza sino por su constancia.
Para hacer que una lámpara esté siempre encendida, no debemos de dejar de ponerle aceite.
Si añades un poco a lo poco y lo haces así con frecuencia, pronto llegará a ser mucho.
La constancia es el complemento indispensable de todas las demás virtudes humanas.
Nada es constante en este mundo sino la inconstancia.
¡Qué felices serían los campesinos si supieran que son felices!
Mientras el río corra, los montes hagan sombra y en el cielo haya estrellas, debe durar la memoria del beneficio recibido en la mente del hombre agradecido
No confiéis en el caballo, troyanos. Sea lo que sea, temo a los Dánaos (griegos), aun portando regalos
La desesperación es el medio para quien no tiene ya esparanzas
No todos lo podemos todo