La fe en que no hay acontecimiento feliz o desgraciado al que no podamos dar un sentido enderezándolo al bien, me ha acompañado siempre y me sigue acompañando, y no estoy dispuesto a renunciar a ella, ni para mí ni para los demás.
La fe se refiere a cosas que no se ven, y la esperanza, a cosas que no están al alcance de la mano.
Se puede hacer muy poco sólo con fe, no puede hacerse nada sin ella.
Aquel que tiene fe no está nunca solo.
El hombre que tiene fe ha de estar preparado, no sólo a ser mártir, sino a ser un loco.
En nuesta confianza en nosotros, lo que incrementa nuestra fe en los grandes valores de la humanidad, en la certeza de que esos valores tendran que prevalecer. No podran ser destruidos
Pero seria hipócrita el decir que yo soy el Presidente de todos los chilenos. No, hasta hay gente que quisiera que estuviese frito en aceite y soy chileno
No dudaría un momento en renunciar si los trabajadores, los campesinos, los técnicos y profesionales de Chile así me lo demandaran o sugirieran
Aquí no hay primavera de Praga, es la primavera de Chile
Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán de nuevo las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor. ¡Viva Chile! , ¡viva el pueblo!, ¡vivan los trabajadores!