Cada vez iré sintiendo menos y recordando más
Por muy lejos que el espíritu vaya, nunca irá más lejos que el corazón
Cuando los ojos ven lo que nunca vieron, el corazón siente lo que nunca sintió
Yo podría estar encerrado en una cáscara de nuez y sentirme rey de un espacio infinito
No sé tu nombre, sólo sé la mirada con que me lo dices
Frente a la muchedumbre, los mediocres son los más elocuentes.
Los ricos no pueden comprar el privilegio de morir viejos.
Cuando las calamidades caen sobre un Estado, se olvidan los dioses y nadie se preocupa de honrarlos.
Dícese que los regalos persuaden aun a los dioses.
Lo esperado no sucede, es lo inesperado lo que acontece.