El saber es la única propiedad que no puede perderse.
No se puede desatar un nudo sin saber cómo está hecho.
Vale más saber alguna cosa de todo, que saberlo todo de una sola cosa.
Es detestable esa avaricia espiritual que tienen los que sabiendo algo, no procuran la transmisión de esos conocimientos.
Cada día sabemos más y entendemos menos.
El humorismo no es una facultad del espíritu sino del corazón.
La astucia es a menudo molesta como una lámpara en un dormitorio
Lo que el vértigo es para el cuerpo, eso es la embarazosa timidez para el alma
No arrepentirse de nada es el principio de toda ciencia
El humor no es un don del espíritu, sino del corazón