Tal vez el mundo sería algo más habitable si supiéramos cómo reunir las palabras que van errando por aquí y por allá.
El mundo es infinito no sólo en todas las direcciones del espacio, sino también en sus verdades.
Yo os digo: es preciso llevar dentro de uno mismo un caos para poder poner en el mundo una estrella.
El mundo pertenece al entusiasta que permanece tranquilo.
El mundo es un absurdo animado que rueda en el vacío para asombro de sus habitantes.
Madre: la palabra más bella pronunciada por el ser humano.
La más bella palabra en labios de una persona es la palabra madre, y la llamada más dulce: madre mía.
No busques al amigo para matar las horas, sino búscale con horas para vivir.
Vuestra alegría es vuestra tristeza sin máscara.
La más bella palabra en labios de un hombre es la palabra madre, y la llamada más dulce: madre mía.