El que tiene miedo de la pobreza no es digno de ser rico.
No puede terminarse con la explotación del pobre por medio de la destrucción de unos cuantos millonarios, sino eliminado la ignorancia del pobre y enseñándole a no cooperar con sus explotadores.
La pobreza es un gran enemigo de la felicidad humana. Destruye la libertad y hace impracticables algunas virtudes y sumamente difíciles otras.
Sólo hay una clase de la sociedad que piensa más en el dinero que los ricos, y son los pobres. Los pobres no pueden pensar en otra cosa. En eso consiste la tragedia de ser pobre.
El día que la mierda tenga algún valor, los pobres nacerán sin culo.
Todos deseamos llegar a viejos y todos negamos que hemos llegado.
Hay libros cortos que, para entenderlos como se merecen, se necesita una vida muy larga.
Mala cosa cuando en el ánimo se representa la temeridad con rostro de valentía, y la cordura con rostro de cobardía.
En la obediencia está la paz de todas las cosas; a Dios primero, a la razón y a la justicia.
La paciencia es virtud vencedora. La impaciencia es vicio del demonio.