Los hombres grandes son aquellos que sienten que lo espiritual es más poderoso que cualquier fuerza material y que son las ideas las que rigen el mundo.
La grandeza y el honor son como los perfumes: los que los llevan, apenas los sienten.
La grandeza de un hombre reside en saber reconocer su propia pequeñez.
No temáis a la grandeza; algunos nacen grandes, algunos logran grandeza, a algunos la grandeza les es impuesta y a otros la grandeza les queda grande.
El hombre que se levanta es aun más grande que el que no ha caído.
Todos deseamos llegar a viejos y todos negamos que hemos llegado.
Hay libros cortos que, para entenderlos como se merecen, se necesita una vida muy larga.
Mala cosa cuando en el ánimo se representa la temeridad con rostro de valentía, y la cordura con rostro de cobardía.
En la obediencia está la paz de todas las cosas; a Dios primero, a la razón y a la justicia.
La paciencia es virtud vencedora. La impaciencia es vicio del demonio.