Biografías: Son el ejercicio de la minucia, un absurdo. Algunas constan exclusivamente de cambios de domicilio.
Cuando el hombre no se encuentra a sí mismo, no encuentra nada.
Conócete. Acéptate. Supérate
Sé lo que quiero: tengo metas y opiniones. Dejadme ser yo misma, con esto me basta y me sobra
Nada refleja tanto el carácter de un hombre como su comportamiento con los tontos
La primera obligación de la inteligencia es desconfiar de ella misma.
Todos somos iguales ante la ley, pero no ante los encargados de aplicarla.
Para hacerse oír, a veces hay que cerrar la boca.
Tenía la conciencia limpia; no la usaba nunca.
Muchos que quisieron traer luz, fueron colgados de un farol.