La cara no es jamás opaca del todo; el alma se muestra a través de sus muros.
El alma más fuerte y mejor constituida es la que no se enorgullece ni enerva con los éxitos y a la que no abaten los reveses.
Odio las almas estrechas; sin bálsamo ni veneno; hechas sin nada malo ni bueno.
El mejor día es el día en que el alma tiene hambre y sed.
El alma es un océano bajo la piel.
La mayor parte de los fracasos nos vienen por querer adelantar la hora de los éxitos.
Te odio con el odio de la ilusión marchita.
Si eres orgulloso conviene que ames la soledad; los orgullosos siempre se quedan solos.
Busca dentro de ti la solución de todos los problemas, hasta aquellos que creas más exteriores y materiales.
El cuerpo no es más que un medio de volverse temporalmente visible. Todo nacimiento es una aparición.