Las grandes aflicciones jamás han enseñado, y mientras dure el mundo jamás enseñarán ninguna buena lección a parte alguna de la humanidad. Las miserias extremas, igual que las más grandes dichas, dejan ciegos a los hombres.
¿Alguna vez has visto la mirada de un perro abandonado en la calle? Si lo has hecho, habrás conocido la tristeza en toda su plenitud.
Se oscurece el sol al mediodía y enmudece la música del alba cuando hay tristeza en el corazón.
La tristeza no es, en muchos casos, sino la forma más refinada de la hipocresía.
La tristeza ocupa siempre lo interior de las alegrías del hombre.
Lo triste de la arquitectura moderna es la resistencia de su material
Las manos que dicen adiós son pájaros que van muriendo lentamente
Lo más admirable de las democracias es la facilidad con la que cualquier persona puede pasar de la crónica policial a la crónica social
Quien hace un poema abre una ventana
Ser poeta no es sólo decir grandes cosas, sino ser una voz reconocible entre todas las demás